
Durante las últimas semanas, los “presidenciables” del Partido Revolucionario Moderno (PRM) habían intensificado los actos proselitistas.
En ellos, promovían su figura política y su gestión al frente de las instituciones que dirigen, dejando claras sus aspiraciones a ocupar la casilla presidencial del partido oficialista.
Los mítines y demostraciones de fuerza registrados en los últimos días agudizaron los señalamientos de que estos aspirantes se han aprovechado de su posición en el Gobierno para promover sus figuras y acciones, buscando generar simpatías dentro de la militancia oficialista y el resto de la población dominicana.
Con seis de los aspirantes ocupando una posición en el Estado, y otra que goza de un cargo electivo y una alta posición dentro del partido, sumado a la gran cantidad de titulares de distintas instituciones que comenzaban a expresar su favoritismo por uno u otro de los contendientes, la percepción fue que los funcionarios públicos se habían integrado de lleno en la campaña a destiempo que se gesta dentro del partido oficialista.